Cinco días en el Camino del Norte

El Camino de Santiago de la Costa, o Camino del Norte, es el Camino de Santiago que empieza en Irún y transcurre por la Costa Cantábrica (wikipedia)

Durante mi última semana de vacaciones de verano de 2012, y de forma totalmente improvisada, me escapé en solitario a realizar 5 etapas del Camino del Norte, concretamente las comprendidas entre Irún y Gernika.

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Camino del Norte
Saliendo del bosque, en la segunda etapa entre Donostia y Zarautz.

Hacía años que quería conocer el Camino de Santiago, sin duda una de mis grandes citas pendientes en lo que a caminar se refiere. Tenía una semana de vacaciones por delante, sin nada planeado, y muchas ganas de patear y descubrir nuevos horizontes. Era la ocasión ideal.

Me decidí por el Camino del Norte porque me habían hablado muy bien de él: montaña, bosques, paisajes costeros… También por ser menos transitado que el Camino Francés. En poco tiempo, la decisión estaba tomada, y los billetes de autobús comprados. Las etapas a realizar, a priori, iban a ser las siguientes:

  1. Irún – San Sebastián /Donostia
  2. San Sebastián / Donostia – Zarautz
  3. Zarautz – Deba
  4. Deba – Markina
  5. Markina – Gernika
Camino del Norte
La playa de La Zurriola, en Donostia

La verdad es que, antes de partir, tenía dudas de si valdría la pena la paliza de autobús (un día para ir de Alicante a Irún, y otro para el regreso de Bilbao a Alicante). Ahora que estoy de vuelta puedo decir que… Vaya si ha valido la pena!

Este viaje me ha marcado. Diría que más que mi reciente escapada a Ordesa y Monte Perdido. Puede que incluso más que el Viaje a Alpes de 2010. ¿Las razones? No las tengo muy claras… Los paisajes, aún siendo muy hermosos, no lo son tanto como en Pirineos o Alpes. Quizás tenga que ver con la improvisación, con ese “lanzarse a la aventura”, sin tener muy claro qué es lo que me iba a encontrar, y si me iba a gustar…

Camino del Norte
Etapa entre Zarautz y Deba

En el Camino del Norte se ha repetido algo que descubrí en Alpes, y que también me pasó en Pirineos: desconexión. Desconexión total con la “vida normal”. Todo queda atrás. Los días se viven plenamente. Desde que desayunas, antes de que salga el sol, hasta que te acuestas, no demasiado tarde, totalmente rendido. Cuando por la noche haces memoria de todo lo vivido durante la jornada, parece imposible que tantas cosas quepan en un sólo día. Por eso han sido suficientes cinco etapas para dejarme huella.

Lo tengo claro: una de las mejores cosas ha sido la gente que he conocido. Las peregrinas y peregrinos con los que he compartido el Camino, y con los que he hecho amistad en apenas unos días. Camaradería, buen rollo, todos dispuestos a ayudarte. Lo mismo con los hospitaleros. Mágico.

En el Camino descubres (gracias a mi tocayo por esta apreciación) que puedes “sobrevivir” con muy poco, con las cosas que caben en una mochila.

Camino del Norte
Etapa entre Zarautz y Deba

En el aspecto fotográfico, opté por llevarme la cámara compacta: la Canon Ixus 220 HS. Pensé que si me llevaba la réflex, aparte de tener que cargar más peso, iba a estar parándome constantemente a sacar fotos, perdiéndome parte de la experiencia. Fue la decisión acertada.

Sin duda, el Camino de Santiago tiene algo especial. Lo tengo claro, volveré para terminarlo…

Artículo publicado originalmente en mi otro blog LinkAlicante en Agosto de 2012.